"La brisa débil no susurra nada. El agua grita sublime. Sus pies, se balancean. Respira profundo, se detiene, ya es hora. Sus dedos ya no tocan el puente, pronto estará bajo el agua. Con los ojos cerrados, pero espiando la vista en medio de la caída. Una ventisca, sol de verano. Un río rico y majestuoso. Una inundación de endorfinas trae una calma sin igual. Ahora estás volando. Ves todo mucho más claro que desde tierra firme. Todo está bien. Lo estaría, si no estuvieses en medio de la caída. Golpeas para frenar la gravedad. Que podría detener la caída? Daría todo porque mis dedos tocaran de nuevo la cima. Pero ya está, es un hecho. El silencio ahoga el sonido. Antes de saltar, ¿por qué no vi la vista en medio de la caída? No! Debí haber pensado en la vista en medio de la caída. Si solo hubiese sabido cómo era la vista en medio de la caída!"
Se llama la vista a la mitad del camino
En el penúltimo capítulo
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